El objetivo de las diferentes intervenciones que el IPCE ha realizado en las esculturas, que desde 1920 se ubican en los jardines del Palacio de Buena Vista, sede del Cuartel General del Ejército en Madrid, se han dirigido a solventar las patologías de deterioro que presentaban, originadas éstas por su prolongada estancia a la intemperie.
India abrazando el cristianismo, obra que supuso la medalla de segunda clase en la Exposición Nacional de Bellas Artes de Madrid de 1862 a Juan Figueras y Vila, presentaba un acusado biodeterioro, grietas y fisuras, así como la pérdida de alguno de sus elementos. La escultura ha sido sometida a un minucioso proceso de limpieza mecánica y a un tratamiento biocida.
El Valor, esculpida en piedra de Novelda por José Alcoverro i Amorós, mostraba gran acumulación de suciedad en toda la superficie, principalmente depósitos orgánicos, costras negras producidas por la contaminación y una pérdida significativa de volúmenes y relieves. Con materiales inocuos y reversibles, se ha eliminado la suciedad, así como consolidado la obra adhiriéndole los elementos fragmentados.
Venus y Cupido de Pietro Tenerani, discípulo de Canova y colaborador de Thorvaldsen en Roma, presentaba fragmentación, pérdidas volumétricas parciales y numerosos añadidos en yeso. La intervención ha detenido el deterioro del mármol y consolidado los fragmentos conservados de ambas figuras.